Metilfolato - Recupera tu bienestar mental.

Nunca imaginé que un déficit de folato podía afectar tanto. Vivía con una tristeza constante, sin ganas de nada. Después de un mes, duermo mejor, me levanto con energía y hasta mis pensamientos se sienten más ordenados. No es solo físico, es mental.

Mi terapeuta me habló del metilfolato y pensé que era otro suplemento más. Pero cuando empecé, noté que ya no necesitaba tres cafés para funcionar. Mi mente está más despierta y sin ansiedad. Esto sí se siente diferente. Seguiré probando y les voy contando.

Soy mamá y ver a mi hijo más tranquilo y enfocado no tiene precio. Siempre fue inquieto, distraído… pero desde que su pediatra recomendó metilfolato, su concentración mejoró muchísimo. No es un milagro, es entender lo que su cuerpo realmente necesita.

Pasé años con bajones emocionales sin explicación. Después de dos semanas con estas gotas, mi ánimo cambió. No me siento acelerada, solo tranquila y enfocada. Es un equilibrio que no había sentido antes y que solo entendemos quienes lo padecemos.

Pensé que estaba perdiendo la cabeza… no podía concentrarme ni disfrutar nada. Mi médico me explicó que mi cuerpo no procesaba bien el ácido fólico. Empecé con Metilfolato y fue como encender la luz otra vez. Volví a sentirme yo.